Estos rituales, según la tradición, están destinados a hacer la transición de los jóvenes y adolescentes de la edad adulta joven y se llevan a cabo en las denominadas escuelas de iniciación, más reconocidos por la ley. Cada año, decenas de adolescentes mueren en Sudáfrica estas escuelas de iniciación, por donde pasan miles al año. Grupos de niños sudafricanos de etnia xhosa, sotho y Ndebele suelen pasar alrededor de un mes en zonas forestales o de montaña aisladas, para estos ritos de iniciación, que incluyen lecciones de coraje y la disciplina de los hombres.
Estos incluyen rituales de circuncisión realizadas por los cirujanos tradicionales y, a veces se utilizan materiales no estériles. Además de la propia circuncisión, a los jóvenes se les enseña lecciones de coraje y disciplina. Las circuncisiones chapuceras conducir al órgano sexual de los niños tienen que ser amputada o, en casos extremos, puede causar la muerte
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